El placer de no hacer planes

Qué lindo es tomar la vida como viene, verda' de Dios...

Ok, no estoy en contra de los planes, de hecho me gusta tener, más o menos, un esquema de lo que quiero lograr y, por tanto, hacer lo correspondiente para poder llegar a esa meta. Pero de la misma forma adoro hacer cosas que no tienen nada que ver con esas metas o esos caminos, me encantan las situaciones que dependen de una decisión de segundos, o a veces de ninguna decisión.

No hay nada como agarrar el auto, ventanas abajo y salir a manejar sin rumbo fijo... claro, si las estrellas se pudieran observar sin ningún problema haría la experiencia mejor, pero eso es difícil acá---uno de los motivos para extrañar argentina, brasil o venezuela, pareciera que en México se nos están acabando los lugares donde podamos observar las estrellas sin contaminación visual proveniente de algún pueblito, y eso que es un país gigante.

Viva manejar por ahí, alejando las preocupaciones de la vida diaria aunque sólo sea por ratos.
Viva caminar sin rumbo fijo buscando los recovecos perdidos de la ciudad, que son los que más gusto guardan.

Viva vivir, sin mapa del camino

DdBF